Cuídate de

La monotonía acabará con todos
Sin piedad, ni permiso
Destrozando todo a su paso
a ti, a mí

No quedarán sino lamentos
De lo que pudo ser y no fue
De los quizás, de los por qué no
Que rondarán en nuestra cabeza después

Cuídate de no estar
Pues ahorita quiero que estés
Porque quizás, cuando quieras estar
Tu puesto estará ocupado

Viviremos de arrepentimientos
Lamentándonos de lo que no dijimos
Por miedo a ser vulnerables
O porque simplemente no quisimos

Cuídate de creer
Que eres mi última esperanza
Porque quizás hoy la seas
Pero mañana no necesitaré fe

Erramos al creer que somos irreemplazables
Y fácilmente olvidamos
Que vinimos al mundo para ser cambiados
Que servimos por poco tiempo
Y que en poco, nuestros días habrán acabado

Cuídate de pensar
Que no tengo vida más que la tuya
Porque, sí, quizás hoy no tenga otra
Pero quizás mañana tendré muchas

Cuídate de no verme
Porque quizás
Cuando por fin decidas hacerlo,
No me verás,
No estaré.